diumenge, 5 d’abril del 2009

Un museo en miniatura

Hace escasas dos semanas los alumnos de latín de nuestro centro hicimos una visita a L'Iber, Museo de los Soldaditos de Plomo, ubicado en el casco antiguo de Valencia en el palacio de los marqueses de Malferit, que resulta ser el más grande del mundo en cuanto a soldaditos de plomo se refiere y que cuenta con el afán de difundir la historia de Valencia, de España y del mundo a través de la propia historia de la milicia, como apunta la misma página web.
La idea promotora del proyecto surgió de D. Álvaro Noguera Giménez, padre del actual propietario, Alejandro Noguera. Fallecido en 2006, su hijo continuó con su trabajo y con el apoyo de la fundación Libertas 7 el museo abrió sus puertas el 15 de mayo de 2007.
Actualmente, contiene más de 76.500 figuras realizadas con perfecto detalle, aparte del material no expuesto, y una serie de batallas dispuestas de modo que permiten recrear de una manera muy precisa situaciones bélicas, desde la batalla de Gaugamela hasta la serie de las guardias españolas. Incluso podremos encontrar una reproducción de las páginas de Tirant Lo Blanc realmente interesante.
A destacar sobretodo la batalla de Almansa, impresionante por su tamaño y detalle, por los que resulta uno de los trabajos más destacados de la fundación.
También cuenta con distintos talleres didácticos, además de una biblioteca de más de 50.000 vólumenes especializada sobretodo en temática militar que se complementa con la biblioteca de humanidades de la Universidad de Valencia.
En mi opinión es una visita recomendable, por el detalle, por el trabajo y por lo increíble de las recreaciones.

1 comentari:

Natalia ha dit...

¡Hola!

No sé qué añadir a este post,¡porque lo has escrito casi todo!

Simplemente decir que bien valió la pena dedicarle una tarde a la visita,y dar las gracias no sólo por abrirnos las puertas del museo, que ya de por sí es impresionante; sino porque nos dedicaron toda su atención, y nos mostraron desde la biblioteca privada, hasta sus métodos para confeccionar las maquetas (incluyendo el espacio que hace las veces de almacén,donde pudimos tocar las figuras).

Cosas que no podríamos haber visto de haber sido una visita ordinaria.

¡Un saludo!